Este fin de semana llega a Salta “El jorobado de París” una obra que lleva más de 30 años en escena. Muchos Quasimodos formaron parte del elenco y tuvimos el placer de hablar unos minutos con Francisco Sureda, el actor que actualmente representa a este personaje que es tan necesario visibilizar, sobre todo en estas épocas en las que la gente se está más preocupada por cómo se ve por fuera y no por cómo se siente por dentro.
¿Cómo se están preparando para la presentación en Salta?
Estamos hace un tiempo con la rutina de la gira, sacando todo de nosotros, siempre lo damos todo, así que durmiendo lo más posible, preparándonos mentalmente para una actividad que es completamente gratificante y una experiencia maravillosa.
Yo soy uruguayo, entonces no conozco muchas de las ciudades a las que estamos yendo y para mí es un privilegio poder recorrer el país.
Para los que no conocen la obra ¿de qué se trata y cuál es el rol de tu personaje?
La obra está basada en el Jorobado de París de Victor Hugo, y muchas veces me preguntan si es la de Disney, pero no es la de Disney. Están basadas en el mismo libro, pero ésta es más fiel al libro. Tiene muchos personajes, mucho dramatismo, es una obra que tiene de todo. Tiene escenas para sentirse abrumado, escenas para sentirse enamorado, para sentirse triste, hay muchas escenas cómicas también. Uno pasa por todo en la obra.
Lo principal y el corazón de la obra es el mensaje es Cuasimodo, amarse a sí mismo, amar la belleza interior, no juzgar a un libro por su portada.
Habla de lo que pasa hoy, lo que atraviesan los jóvenes por el bullying. Se trata literalmente de eso, son temas que se viven en todos lados. Desgraciadamente uno piensa que es un problema infantil pero no lo es, son problemas de toda la vida porque hay un montón de gente y grupos marginados que se sienten aislados de la sociedad.
Mucha gente que viene a ver la obra, es gente con síndrome de down, con autismo, gente con diferentes discapacidades, que vienen y se sienten identificados con Quasimodo, porque desgraciadamente, lo creamos o no, son grupos marginados de la sociedad. Los ponemos al costado muchas veces y no está bien, siguen siendo personas como cualquiera de nosotros. Y ese es el mensaje de la obra, un mensaje de amor, un mensaje de unidad.
¿Cuál es la respuesta de la gente después de ver la obra?
Te mentiría si te dijera que la gente no sale extasiada. La verdad que te parece que estoy hablando muy bien de la obra porque soy el protagonista. Yo he llorado con gente en la puerta, familias enteras que vienen a saludar, la madre, la abuela y la nieta, tres generaciones compartiendo el amor por el teatro musical argentino y me dicen llorando lo mucho que les gustó la obra y yo lloro con ellos por supuesto, porque soy un llorón y es maravilloso. Maravillosa ha sido la recepción de la obra en todos los lugares en los que hemos estado.
¿Qué te aportó el personaje a vos y que le sumaste vos al personaje como actor y como persona?
A mí me cambió la vida, Pepe Cibrián y Ángel Mahler me cambiaron la vida completamente, porque esta es mi primera gran producción a este calibre, y pasé de 0 a 100, pasé de nada a ser el protagonista. Siempre voy a estar agradecido con estos dos grandes titanes y reyes del teatro musical argentino y, por suerte, algo que me gusta mucho que viene del genio de Pepe y de su dirección actoral es que él agarra un poco de cada actor para la interpretación. Cada Quasimodo ha sido distinto.
En mi caso es un Quasimodo muy puro, muy inocente, infantil, un corazón muy noble, muy leal y que, por suerte, son cosas con las que me identifico mucho. Me cuesta decirlo en voz alta, dicen que soy muy humilde, cuesta admitir cosas buenas de uno mismo, pero hay que quererse un poco, cosa que aprendí muchísimo de Quasimodo que es amase a sí mismo, amar.
Todas las noches, cada vez que digo: No se enteran Que adentro mío No lo ven…no lo pueden ver Que yo bello soy…me llegan muy al corazón, y son muy fuertes esas palabras, y todos nos merecemos amarnos y hablar bien de quienes somos.
¿Cómo enfrentás la responsabilidad de interpretar a Cuasimodo?
En cuanto a responsabilidad actoral yo nunca me sentí fuera de calibre porque me conozco como actor y se todo lo que puedo dar. Si es una enorme responsabilidad el mensaje de la obra, ahí viene la responsabilidad de serle fiel al público porque lo importante es el público, que el público entienda la obra y que le guste la obra, porque tenemos que recordar que actuamos para ellos.
Entonces yo, durante todo el proceso de audiciones, durante todo el proceso de ensayos ya sentí que enorgullecía a mis directores, y ahora durante el proceso de funciones tengo que enorgullecer al público, porque el público tiene que entender el mensaje, es lo más importante, y eso es un peso enorme.
Sin miedo pero con mucha responsabilidad
Totalmente, directo, aunque tengas miedo, aunque haya funciones en las que vos digas: estoy cansado, no dormí. P Pisás el escenario y lo das todo igual.
La función en Salta será el domingo 25 de agosto a las 20 en el Teatro Provincial. Las entradas están a la venta únicamente por www.entradauno.com