Este año, la conocida y reconocida banda de jazz se presentará en la ciudad de Tucumán, velada a la que están todos invitados. La cita será el miércoles 26 de julio a las 21 horas en el Teatro Municipal Rosita Ávila.
Este viernes 14 de julio La Pequeña Jazz Band cumple 45 años. Los músicos recuerdan que la primera actuación fue unos días antes de esa fecha en un festival de la Técnica Nº 2 al que fueron invitados con una participación especial. Desde ese día y aunque el tiempo y la vida continuaron transcurriendo, la banda perduró.
La música parece ser el secreto que mantiene juntos hace tantos años a Nelson Coly Montero (clarinete y saxo alto), José Domingo Guzmán (piano y voz), César Gamarra (trompeta), Pepe Alfarano (batería), Jorge Sastre (bajo y clarinete), Meir Levín (guitarra), Maximiliano Arce (bajo) y Guillermo “Grillo” Gamarra (saxo tenor).
César cuenta que en la década del 70 era difícil conseguir partituras y discos de jazz, así que cada vez que llegaba una banda a Salta, la esperaban a la salida del lugar en el que tocaban para tratar de charlar con ellos y compartir. “No era fácil en ese entonces conseguir partituras, discos, y cuando venían esos músicos de Buenos Aires, nosotros nos prendíamos y no los soltábamos, y aprendíamos así. Pudimos tocar con los grandes del jazz, por ejemplo, cuando vino La Porteña , Suit 39, la Antigua Jazz band, Caoba, recuerda.
Pepe: Super buena onda todos porque veían que llegaban a Salta, a un lugar históricamente cuna del folclore, y de pronto se encontraban en aquella época con jóvenes músicos de jazz. Era como muy raro, quizás también por eso nos daban un poco más de bolilla y nos ayudaban, y nos enseñaban cosas.
¿Qué es lo que mantiene a la banda después de tantos años?
José: La amistad.
Pepe: Son 41 años de amigos. La otra vuelta estaba intentando acordarme si alguna vez nos enojamos y nos peleamos, y yo creo que nunca.
César: Lo que nos une es una profunda amistad de años, las vivencias que tenemos juntos. Tocar es algo que te hermana, que te lleva a un clímax, porque cada vez que tocamos juntos y podemos expresar esta música que tiene más de un siglo nos da mucha alegría, nos hace encontrar cada vez más amigos.
José: Éramos chicos del secundario y fuimos aprendiendo juntos, el jazz no lo hacés leyendo una partitura ni escuchando un disco. En aquella época, era cuestión de ir preguntando y ensayando mucho. La improvisación es algo que se logró a través del tiempo. Muchos de nosotros leíamos música, pero de ahí a largarnos a crear los momentos espontáneos era imposible. Y hoy es bastante más accesible. Y, a partir de ahí, conocernos en nuestras vidas, el desarrollo de cada uno, de sus estudios y perdurar con la formación en el tiempo.
Yo no he tenido el honor de tocar con mi hijo, pero más de uno de estos muchachos sí.
César: El hijo de Meller toca la guitarra, el hijo de Pepe toca la bateria, el hijo de Coly el saxo
Pepe: Lo malo de eso es que los chicos tocan mejor (risas).
¿Cuáles fueron los inicios de la banda?
César: Jorge Sastre vino de Estados Unidos, de un intercambio cultural, y trajo su clarinete. La idea era juntarse con alguien que hiciera jazz, Coly y yo tocábamos en una orquestita que se llamaba “La orquesta juvenil de Salta”, siempre en los recreos, tratábamos de hacer algo de jazz, pero no nos daba la solvencia.
Ahí apareció un rosarino pianista que nos ayudó a incursionar en el camino de jazz. Él vino con esa iniciativa, Jorge lo trajo a Pepe que tocaba la batería y a José que eran compañeros del colegio.
Nos juntamos un día frío de invierno en San Lorenzo y la primera impresión fue que sonó bien porque Coly llevó unos arreglos de la orquesta de su papá y al principio nos sorprendimos nosotros mismos porque sonaba a algo armadito de tiempo y ahí tuvimos la certeza de que eso iba a caminar.
Posteriormente se fueron integrando los otros instrumentos y nuestra primera actuación fue unos 15, 20 días después y de ahí ya no paró la historia hasta hoy.
Las entradas anticipadas para el show en Tucumán pueden adquirirse llamando a Grillo Gamarra: 381 678 8626
TEXTO Y FOTOS: LUCIANA CASSINA